No tenía aún el placer de conocer este cercano restaurante a donde vivo, así que enseguida que supimos del evento hicimos la reserva y allí fuimos con mucha ilusión y expectativas dado el buen nivel que los 3 han demostrado este año en el concurso. El precio del menú se fijó en 55€, IVA y bebidas incluídas.
El restaurante AZAFRÁN se encuentra en la Avenida de los Reyes Católicos de Villarobledo. Por fuera tiene un aspecto sobrio en color wengué, y en la puerta se anuncian los menús y algunos platos fuera de carta. La sala muy amplia, con buena separación entre mesas, elegante y que en parte me trajo cierto recuerdo a la del Restaurante MARALBA de Almansa (que podeis ver pinchando AQUI). En la entrada a la sala, una barra de color rojo potente que contrasta con el resto, junto con un cuadro de unas tinajas tipicas de La Mancha en su parte trasera....
Llegamos pronto, y pudimos pasar a la cocina donde el equipo de Teresa junto a Fran y a Peña estaban preparando el menú sorpresa que podríamos degustar. Son gente ENCANTADORA, SENCILLA, HUMILDE, gente que sabe que son aún muy jovenes y con mucho margen de proyección, mejora y que no se les sube para nada a la cabeza el tema del famoseo del concurso. Nos trataron de forma muy cercana y agradable, y Peña y Fran nos contaron como ya no forman parte de los restaurantes en los que trabajaban al entrar en TOP CHEF y como ahora buscan su propio camino, en busca de cumplir su sueño de montar sus propios grandes restaurantes. Mucha suerte a ambos y a Teresa, sin duda toda la ilusión la tienen.
Para acompañar tan sublime cerveza, se nos sirvió un aperitivo de CORTEZAS A LA MIEL en unos vasitos que estaban realmente deliciosos, el contraste dulce-salado con un producto tan sencillo y tan típico de La Mancha realmente me encantó.
También hicieron acto de presencia LOS PANES ARTESANOS, calientes y recién hechos como no podía ser mejor ni de otra manera en una cena de nivel. En este caso creo recordar que se sirvió un pedazo de cada uno de QUESO, FOCACCIA, DE ACEITE, Y PAN DE HOGAZA típico. Geniales todos.
Seguidamente pasamos al APERITIVO, concretamente un TRIPLE aperitivo en el que cada chef puso su granito de arena en el plato para empezar lo mejor posible la cena...
De izquierda a derecha encontramos:
1) CORDERO CON BONIATO de Teresa. Sabor y cremosidad sin excentricidades.
2) BLOODY MARY EN EL PLATO, de Fran. Plato que elaboró en la prueba de hacer un cocktail en versión comestible en esta edición de Top Chef 2014. GENIAL, muy, muy logrado tanto en sabor como en proporciones de sabores para que unos no quiten protagonismo a los otros y realmente en boca sepa como el famoso cocktail, con el toque de apio, su puntito picante, el tomate...
3) YEMA CURADA CON COSTRA DE PAN, CREMA DE ESPINACAS Y PIÑONES, de Peña. También un aperitivo de alto nivel y gran sabor. Formado por una base de yema de huevo curada en sal-azúcar cubierta por una fina lámina de pan tostado, un puntito de crema de espinacas y unos piñones tostados. Un conjunto muy, muy bueno, que al explotar en la boca se combinaba de forma muy acertada, sabroso, proporcionado y elegante.
Para acompañar los aperitivos, se nos sirvió un vino blanco Sauvignon Blanc semiseco de ARGUM, bodega que por lo que ví, patrocinaba el evento, puesto que todos los servidos eran suyos y estaban en exposición junto a las mesas... Un Sauvignon Blanc DO de La Mancha de una bodega local (Bodegas el Castillo), fresco y correcto sin más, y que no se si en consonancia con el menú...
Continuamos el menú con un plato hecho por PEÑA: "ARROZ CON BACALAO Y MORRO"
Foto de Carlos Torres:
Magnífico punto del arroz, genialmente logrado, láminas de bacalo y de morro de cerdo que aporta una untuosidad en boca muy buena, dejando casi "pegados" los labios. Un conjunto bien logrado y elementos bien integrados en un plato muy sabroso de este chef vallisoletano. Debatiendo sobre el mismo los asistentes que estabamos en la mesa, para los que más gustan de sabores potentes, quizá se echaba en falta algo de potencia de sabor del bacalao y el fondo que puede lograrse para potenciar el conjunto, y para los menos dados a potencia, perfecto de punto. En general, un muy buen plato.
Este plato se maridó con el mismo vino que el anterior... de nuevo un fallo incomprensible en una cena de este supuesto nivel y precio, más aún cuando hablamos de un vino correcto pero nada especial... (PVP del mismo, 4€ la botella en tienda). Aquí empezamos a echar en falta la labor de un sumiller adecuado. El hecho de que una bodega patrocine este tipo de cenas puede dar lugar a incidencias así, en el que se eche en falta la labor de un sumiller de nivel que en el desempeño de su labor busque el compañero perfecto para cada plato, independientemente de otros intereses...
El siguiente plato fué también elaborado por PEÑA: "SALMÓN CON YOGURT, MARACUYÁ Y SALICORNIA"
Muy buen plato de Peña, a destacar sin duda el GENIAL sabor del fondo de yogurt y maracuyá, perfectamente integrados y cuya acidez y suavidad a la vez contrastaban a las mil maravillas con la grasa del salmón. La salicornia aporta un toque crujiente y salinidad al plato que también le iba bastante bien. En conjunto un muy buen plato, de sabores bien integrados, potentes, un plato bien ideado y finalizado. Como todo, discrepancias en el punto de cocción de salmón (más o menos pasado), pero como en todos los pescados y carnes, esto va siempre al gusto del comensal.
Este plato se maridó con un vino CENCIBEL CASTILLO DE ARGUM de la misma Bodega que el anterior. Un tinto nos pareció simplemente lo que es...lo que es. Un vino joven DO La Mancha. Correcto, pero nada especial y diferente (para mi un cencibel así no le iba NADA EN CONSONANCIA AL BUEN PLATO DE SALMÓN) y con el que de nuevo echamos en falta la buena labor de la sumillería formada y algo más acorde con el nivel y precio del menú...
El plato siguiente del menú fué uno elaborado por FRAN: "PULARDA EN PEPITORIA CON SU PIEL CRUJIENTE"
En el concurso ya realizaron una prueba con "PEPITORIA", y la verdad que Fran domina este aspecto muy bien. Su cocina es una cocina refinada, con gran dominio de los fondos de los platos y el sabor. Sin excentricidades ni técnicas vanguardistas, consigue elegancia en los platos y buen conjunto final.
Buen punto de la pularda (importante que no quede seca, sin duda), genial el fondo de salsa pepitoria (potente, denso y sabroso), y bien ideada y lograda la piel crujiente encima, aportando un contraste de textura genial. Un plato "de antaño" refinado y bien logrado. Sin fuegos artificiales, pero logrando lo que pretende, sin duda.
Para maridar este ave se sirvió un VINO DE AUTOR de la misma bodega, un coupage de varietales con crianza de 12 meses en barricas de roble francés. Bien decantado previamente y servido. Un vino bastante por encima del Cencibel anterior, con buenos matices en boca y nariz.
Granizado de cola sobre un fondo de fresa y una espuma de vainilla. Los 3 elementos de uno de los polos más famosos de nuestra infancia perfectamente equilibrados y reconocibles, sin que uno destaque más por encima del otro. Cerrando los ojos, uno tiene la sensación de ese sabor genuino en la boca, que al fin y al cabo es de lo que se trata. Divertido y logrado. GENIAL.
El menú finalizó con un POSTRE DE TERESA "CHOCOLATE BLANCO, YOGURT Y PIMIENTA ROSA"
Los postres son sin duda uno de los puntos más fuertes de Teresa, y nos lo demostró sin duda con éste. Tanto me gustó que solicité repetir, y con la amabilidad esperada no hubo problema alguno. ¡ Me hubiera comido media docena ! Perfecta armonía y equilibro de los ingredientes, cremosidad, el toque picante de la pimienta rosa en contraste con el dulzor del chocolate blanco (me encanta), diferentes texturas... todo un placer para los más golosos, sin duda.
Tampoco hubo un maridaje adecuado para los postres, algo que como digo, es quizá la nota más negativa del conjunto...
Con el café llegaron unos PETIT FOURS muy ricos: MACARON DE BOLETUS Y CHOCOLATE NEGRO CON ARROZ INFLADO
En resumen, una cena buena, un poco "En el jardín del bien y del mal" en conjunto total...
Me quedo con la excelente cerveza artesana del grupo Salvaje elaborada para ese día, me quedo también con el buen nivel de cocina de gente muy joven, con mucho margen de proyección futura y mejora, y que demuestran con estos platos sin duda el buen nivel logrado hasta ahora, con un sabor, equilibrio y acabado de los platos muy bueno. Gente amable, cercana, humilde, que trabaja para hacerse un nombre de altura en el complicado mundo de la alta cocina. Gente que practica una cocina sencilla pero llena de sabor, una cocina fuera de "efectos especiales" pero bien lograda y que como digo, con juventud y ganas de llevarse lo que puedan por delante... como ahora, en su propia senda.
Como puntos negativos para mí diría el ya citado antes: falta de una labor de sumillería acorde a los platos (quizá en parte por el patrocinio de los 3 vinos aportados), la escasa explicación de los platos por parte del servicio y de quienes los elaboraban (teniamos que preguntar nosotros de quien eran), la tardanza en el servicio entre plato y plato (más de 10-15 minutos), y un menú a mi juicio corto para el precio establecido (55€ por un menú de 6 platos en lugar de 8-10 elaboraciones, que tampoco incluían ingredientes caros que aumenten el precio de coste, y bebidas patrocinadas para la casa que tampoco incrementan).
No sé si estoy en lo cierto o no, tampoco me preocupa. He recorrido muchos restaurantes de todo tipo, desde los 3* nacionales a menús creativos de 15€. No cobro un duro por mi blog, mi opinión no es la verdad absoluta, y simplemente expresa la opinión de un cliente, que si como algo debe tomarse, es como una crítica constructiva si se quiere tener en cuenta para mejorar en el futuro aspectos negativos, que es lo que a una mente brillante puede llevar a la excelencia.
Sea como fuere, fué un placer degustar los buenos platos de estos jóvenes cocineros, conocerlos, acercarnos a sus ideas y compartir sobre todo, una buena noche en genial compañía.